¿Qué es la recuperación de disolventes?
Los disolventes orgánicos se utilizan en procesos químicos como la extracción y el secado al vacío, sobre todo para materiales sensibles al calor. Los fabricantes se enfrentan al reto de los bajos índices de recuperación de disolventes, lo que conlleva problemas de conservación de energía, uso de recursos y respeto por el medio ambiente. La recuperación de disolventes es una parte vital de la mejora de la rentabilidad empresarial.
El proceso de recuperación de disolventes comienza cuando a una mezcla líquida se le aplica calor y/o vacío para vaporizar el disolvente. A continuación, los vapores de disolvente se trasladan a un recipiente de vacío o a una bomba de vacío de anillo líquido. Por último, los disolventes recuperados pasan a un concentrador de vacío donde se retienen antes de ser transferidos a un depósito de almacenamiento.
Los sistemas de vacío de recuperación de disolventes suelen constar de una o dos bombas de vacío de anillo de agua utilizadas para la adquisición de vacío. Para completar el sistema, se añade un separador de condensación para la separación y el almacenamiento. Sin embargo, las bombas de vacío pueden utilizar fluidos distintos del agua, según lo exijan los procesos. Entre ellos se encuentran el aceite, el tolueno, el ácido acético y el alcohol.
Los sistemas completos pueden utilizarse en situaciones de presión negativa en una amplia gama de industrias. Se utilizan con sistemas que incluyen secadores de vacío, reactores discontinuos, evaporadores rotativos y granuladores. Así se pueden recuperar partes valiosas de la mezcla del proceso. Estas bombas resistentes a los productos químicos se combinan para extraer de gases bajo diversas presiones de vapor y condiciones a menudo difíciles con un rendimiento excelente.